En los últimos veinte años se ha generado el llamado mercado de Alimentos Funcionales. Son alimentos que por sus características aportan "algo específico" de un modo innato o añadido para aportar contra algún "déficit" en la alimentación o necesario para la "vida moderna". Ejemplo claro es Actimel que "te ayuda a tus las defensas". Según un artículo de El Pais de este domingo pasado, "solo" el 40 % de los alimentos actuales se les puede considerar "ordinarios".
Y es este sector para niños y jóvenes donde están creciendo este tipo de alimentos. Si comenzó en los años 1980 en Japón ante la mayor espernza de vida, lo que comenzó como ayudar a la medicina desde la alimentación para los más mayores, ha llegado a todos los segmentos de edad.
Por ejemplo, los quesitos "La Vaca que Rie" acaba de sacar su producto con OMEGA 3.La tendencia es pensar en la situación actual de los niños (cansancio, muchas horas fuera de casa, estudio, etc) y a los alimentos que toman (zumo, agua, galletas...) añadir un elemento funcional.
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